Cuándo debe preocuparte que tus hijos tengan relaciones sexuales

Como padres, todos tenemos nuestras opiniones sobre cuándo y con quién deberían ser sexualmente activos nuestros hijos. Pero ¿cuál es esa edad? ¿Y cuándo debemos preocuparnos? (Teniendo en cuenta que “siempre” no es una respuesta viable).

Las anteriores preguntas nos las contestarán los expertos del portal web Child Mind.

Sexualidad en adolescentes

Antes de la pubertad

Si un niño exhibe comportamientos “sexuales”, como tocar sus genitales, pueden deberse a una curiosidad normal por su cuerpo y por el de los demás. Si estas conductas ocurren más de lo habitual, por otro lado, o incluyen intentos manifiestos de imitar o realizar actos sexuales, podrían ser algo de lo cual habría que preocuparse.

Los niños son “curiosos, y así es como aprenden sobre el mundo –dice la psicóloga clínica Dra. Samantha Miller, –pero también están conectados a la mímica”. Recuerden: los niños no nacen sabiendo lo que es el sexo; si lo están imitando, es porque han sido expuestos a él.

Debes prestar atención, puesto que, esta exposición, podría ser a través de pornografía, lo que podría indicar negligencia, señala la Dra. Miller; o puede ser que estén expuestos a sexo real, e incluso a abuso.

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Después de la pubertad

Después de la pubertad, cuando sea que pase, los adolescentes se vuelven seres sexuales, con impulsos que son fundamentalmente humanos. Los llamados comportamientos sexuales considerados “reglamentarios” varían de una cultura a otra. El punto, de acuerdo con la Dra. Miller, es que si quieres que tu hija espere hasta el matrimonio para tener relaciones sexuales o hasta que ella piense que “ya está preparada”, depende de los valores que has trasmitido, la comunicación entre ustedes a temprana edad y con regularidad.

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Señales de problemas emocionales

En primer lugar, algunos tipos de actividad sexual adolescente son signos claros de advertencia de problemas subyacentes: si tu hijo coacciona o incluso obliga a otros a tener relaciones sexuales, no solo está yendo en contra de las normas sociales. Esa conducta es uno de los síntomas del trastorno de conducta, un trastorno psiquiátrico grave pero tratable. Y si te sientes preocupado por la promiscuidad de tu hija, una de las cuestiones que debería preocuparte son las enfermedades de transmisión sexual. La actividad sexual arriesgada e imprudente también es síntoma de la manía propia del trastorno bipolar, pero también puede indicar una historia de abuso sexual. Y, por supuesto, las relaciones sexuales traen consigo riesgos reales: embarazos, enfermedades, etc.

 No solo cuando, sino por qué

“No hay reglas establecidas sobre cuándo deberían tener relaciones sexuales nuestros hijos –dice el psiquiatra Dr. Alan Ravitz. –Pero probablemente hay ciertas reglas sobre por qué habría que tener relaciones sexuales. No deberían practicar el sexo porque quieren gustarle a alguien. No deberían tener relaciones sexuales porque se sienten obligados a tenerlas”.

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Actitudes como esa amenazan algo maravilloso, continúa el Dr. Ravitz. “Tener una gran vida sexual es una bendición”. Entonces, ¿cómo puedes proteger a tu hijo y asegurarte de que crezca para tener una vida sexual sana? “Supervisa y brinda orientación”, sugiere el Dr. Ravitz.

Para leer el artículo completo de Child Mind ingresa a: childmind.org/es/articulo/cuando-debe-preocuparse-de-que-sus-hijos-tengan-relaciones-sexuales

Por otro lado, te invitamos a navegar por la plataforma ‘Familias y Sexualidad’ creada por Inmujeres donde encontrarás información sobre mitos de la sexualidad adolescente. Te presentamos dos ejemplos que puedes encontrar a profundidad en el portal:

La educación sexual adelanta el inicio de la vida sexual”

Este es quizá uno de los mitos más difundidos entre las personas adultas, y es uno de los más importantes a desechar para poder hablar de sexualidad con los adolescentes. Lo que se ha demostrado en cuanto a la educación integral en sexualidad es que esta no solamente NO adelanta el inicio de la vida sexual, sino que incluso puede llegar a retrasarla. Por ello, se considera la educación y la información como factores protectores de un embarazo adolescente.”

Las relaciones sexuales durante la adolescencia son inmaduras e irresponsables

Algo que es crucial recordar es que el nivel de responsabilidad varía principalmente por el tipo de educación y experiencias que se han tenido. Los adolescentes pueden tomar decisiones en mejores condiciones de seguridad, libertad y responsabilidad de acuerdo a su momento vital siempre que reciban la formación necesaria. Las y los adolescentes tienen derecho a decidir de forma libre sobre su sexualidad, respetándoles sus decisiones en torno a su cuerpo y vida sexual; como madres y padres sí pueden ofrecerles o acercarles información científica, confiable y clara para que tomen las mejores decisiones sobre su sexualidad.”

7 reflexiones sobre sexualidad para padres:

  • Haces educación sexual continuamente, aunque no estés consciente de ello. Educas a través de los pudores, las caricias, los silencios u opiniones.
  • Una educación sexual de calidad debe dirigirse a que los hijos aprendan a conocerse, aceptarse y a expresar su sexualidad de modo que sean felices.
  • Hay que educar siempre desde lo positivo y no de lo negativo, fomentando la autoestima del niño.
  • Trata de encontrar “oportunidades para enseñar”. Utiliza programas de televisión, libros, tareas escolares, canciones.
  • No esperes que tu hijo te haga preguntas; muchos niños nunca preguntan. Necesitas decidir lo que te importa que él sepa.
  • Hay que estar dispuestos para dialogar. El diálogo no puede ser impuesto; siempre debe existir respeto y aceptación.
  • No veas con ojos de adulto lo que hacen los niños y los adolescentes. No hagas interpretaciones precipitadas.

Para finalizar, te presentamos ‘5 consejos para hablar de sexo con los hijos’ un video realizado por Laura Mascaró, abogada y escritora española, especializada en crianza, educación y emprendimiento: